jueves, 24 de diciembre de 2015

Nochebuena

Estaba todo preparado para cenar. La mesa para dos, aperitivos, crema y pavo... dulces menos que el Amo no es muy de mazapán.

Yo con una falda roja, un moño con una cinta roja y un lazo alrededor del pecho... soy un regalito monismo.

Cuando el Amo llega lo espero arrodillada, con una copa entre las manos. Me mira sonriente. Coge la copa y me abraza poniéndome de pie. Es más guapo...

-Sirve la cena, solo después de cenar abrirás tu regalo.

Cenando me siento a su lado. Y el juega con mi coño desnudo. En el primer plato deshace el lazo que envolvía mis pechos y me quedo así, recibiendo pellizcos, mordiscos y besos en los pezones a cada rato.
Cuando voy a por el sorbete de limón que he hecho de postre (por eso de que al Amo no le gustan los dulces navideños) mi cuchara ha desaparecido y en su lugar hay dos pinzas.  Lo miro.
-Vamos, no tardes.

Pinzo  mis pezones  y cuando Él ha empezado a comer, meto la lengua en la copa y comienzo a dar cuenta de mi sorbete. Al Amo le divierte y me hace una foto. Dice que será su felicitación navideña para sus amigos Dominantes. Yo sonrío y sigo comiendo.

Cuando acabamos recojo la mesa. Me dirijo a donde Él está y me situó entre sus rodillas. Me levanta y me sienta sobre Él.

-A ver Erytheia. ¿Has sido buena este año o debería darte unos azotes?

Yo me río.

-He sido buena Amo.

-Aún así,  creo que antes de tus regalos debería darte unos azotes, para que no olvides ser buena el año que viene.

Me coloca sobre sus rodillas, levanta mi falda y recorre mi culo con sus dedos. Es delicado al hacerlo. Los azotes comienzan a caer despacio, y entre los azotes alguna caricia, algún beso, algún mordisco. Cuando acaba tengo el culo rojo y El la polla dura. Se desabrocha el pantalón y la saca. Me sienta sobre ella y me penetra.  Cabalgo sobre sus rodillas guiada por el ritmo que Él impone agarrando mi pelo. Con la otra mano me frota el clítoris con fuerza.

-Córrete Erytheia.

Cuando lo ordena lo hago y siento también su leche dentro de mí.

Me arrodillo a limpiar bien su polla, hasta dejarla reluciente.

-Perrita buena. Ya puedes abrir tus regalos.
Lo primero que hago es empujar hasta sus pies la caja que contiene sus regalos. Una camisa, unos zapatos, un reloj, una colonia, un flogger y una vara nueva, que el otro día partió la anterior en mi culo. Me sonríe y me dice que le encantan. Me besa y me apremia a abrir los míos.  Hay tres paquetes.  El primero que abro contiene 5 libros que quería leer. Lo beso agradecida. El segundo  un vestido con medias y tacones que quiere verme puestos en fin de año. El tercero un  uniforme de colegiala con lazos zapatos y calzas incluidas ,  dos piruetas grandes, y una paleta de madera en la que viene escrito "niña mala".  

Se me escapa una carcajada, nerviosa.  Me acerco a agradecer al Amo su regalo. Empiezo besando su polla y acabo metiéndola entera en la boca. Una mamada  despacio que acaba en una follada de boca cuando Él se pone de pie y comienza a marcar el ritmo. Me dan arcadas pero no para. Se corre en mi cara.

Se la limpio con la lengua. Él restriega el sémen por mi cara y me da sus dedos para que los limpie. Va hacia la habitación y lo sigo a cuatro patas. 

-Desnudame.

Lo hago, con mucha delicadeza. Cuando está en bóxer me ordena parar. Se mete en la cama.

-Ve a lavarte y ven a la cama anda.

Cuando volví me esperaba listo para seguir usandome  y bueno... no hemos dormido nada.

Me encanta la navidad.

lunes, 14 de diciembre de 2015

La gata

Nunca he sido capaz de comprender por qué mi Amo llama gatita a una zorra como yo... Las gatitas son independientes y elegantes... yo lo único que comparto con una gata es lo muchísimo que me gusta lamer la mano de mi Dueño.

Sin embargo a Él le gusta que yo, además de Su puta, Su sierva, Su zorra y Su perra, sea su gatita... Y yo soy todo lo que Él diga. Hace unas semanas, dejó un paquete en mi casa, una caja envuelta en un precioso papel de regalo negro, con un lazo dorado.

-Tienes prohibido abrirlo hasta que te lo indique expresamente.

Me moría de curiosidad, pero si algo sé, es obedecer una orden directa (casi siempre)... me até las ganas y ni siquiera lo moví de donde Él lo había dejado.

Hoy, cuando salía de trabajar recibí un mensaje.
"Come bien, descansa media hora y prepárate para mí. Estaré allí a las seis. Quiero que abras el paquete y te pongas lo que hay dentro."

¡Por fin había llegado el día!

Me costó mucho comer bien entre tanta expectación, pero no me moví de la silla hasta que me terminé el plato. Después de recoger la cocina y un poco la casa me eché media hora... no dormí demasiado pero descansé un poquillo. Por último, cuando faltaba una hora para su llegada comencé a prepararme para Él. Revisar la depilación, ducharme, secarme bien, maquillarme un poco, peinarme y por fin, abrir el misterioso paquete.

Lo puse sobre la cama y lo abrí con cuidado... ni siquiera rompí el papel en mil pedazos... tenía ganas pero me contuve.  Dentro de la caja, envueltos en papel de seda encontré, unas orejas de gatita negra, unas medias de seda negra, un tanga negro, un collar con cascabel y una cola de gatita... sí, negra.

Me coloqué las medias, medias implicaba tacón así que fui a buscar mis tacones negros. Me puse las orejas y el collar y por último me lubriqué un poco el ano y metí la cola.

Eran menos diez... me fui a la puerta y me coloqué como una gatita esperando a su Amo.

Él llegó puntual. Acarición mi lomo y yo lamí sus pies. Fue hasta un sillón caminando y lo seguí. Con la boca conseguí deshacer los cordones de sus zapatos y descalzarlo, luego fui a por las zapatillas y se las coloqué. Me acarició la cabeza y ronroneé agradecida.  Comenzó a jugar conmigo me acaricia la cabeza y la barriga, yo me pongo bocarriba con las patas en alto y juego con sus brazos, que me hacen cosquillas.

-Mi gatita bonita. ¿Quieres leche gatita?

De un salto me incorporo y maullo, mientras restriego mi cara contra su entrepierna. ¿Que si  quiero leche? Una gatita siempre quiere leche.

-Bueno, vale gatita, te daré leche.

A cuatro patas espero mientras Él saca su polla del pantalón. Voy a lanzarme a lamerla cuando me la aparta.

Pongo cara triste y lo vuelvo a intentar... Sigue moviéndose y comienzo a maullar frustrada. Quiero leche.

Al final un pollazo en los morros me coloca mi premio cerca de la boca. Lo lamo agradecida y me lo trago entero. Se pone muy, muy dura dentro de mí. Lamo con ansia, chupo y juego con mi lengua, hasta que consigo la leche. Trago y me relamo. La beso en la punta y maullo agradecida.

Él acaricia mi cabeza y yo ronroneo de puro gusto. Me sube en su regazo y me acaricia todo el cuerpo. Yo lamo sus manos y su cara mientras Él juega conmigo... Pasamos mucho rato así... me encanta lamerlo todo... y que me acaricie me empieza a excitar.

Me caliento y noto como Él también lo hace, por la dureza de su polla bajo mi cuerpo.

Me coloca a cuatro patas en el sofá. Me quita las orejas, el collar y de un tirón saca la cola.

-Ahora te voy a follar como la puta que eres.

jueves, 10 de diciembre de 2015

El Culo de Erytheia.

Me miro en el espejo... Él está haciendo la cena, estoy cansada y la ducha me ha dejado muy relajada, llevamos todo el fin de semana juntos, todo el fin de semana siendo suya. De espaldas al espejo observo mi culo. Me gustan las marcas.

En la nalga derecha, desde la zona central superior hasta el final inferior tengo una marca con forma de trenza. Él usa un cinturón trenzado porque le gusta el dibujo que queda, y a mí también.  Ayer, cuando llegamos después de comer en el asador, me pidió que lo ayudara a desvestirse. Yo estaba a cuatro patas, desatando sus cordones con la boca, mi culo estaba expuesto y Él sujetaba en la mano el cinturón. El correazo me pilló desprevenida... casi me trago la punta del cordón... Mi cara debió ser un poema, porque Él no podía parar de reír.

En el centro tengo dos círculos rojos enormes, antes, cuando se tomó el café, estaba viendo una película, pero se aburría... la verdad es que no era nada interesante. Me mandó a por el cepillo del pelo. Me ordenó que subiese sobre la mesita baja de rodillas y que me auto-azotase.
-Más fuerte. Zorra, más que zorra. ¿Por qué te azotas?
-Porque soy una puta sumisa Amo.
-¿De quien eres guarra?
-Suya Amo, su propiedad.
-Más fuerte, ahora en la otra nalga.

Yo me azotaba, me insultaba y Él contaba y me daba indicaciones. Cuando me ordenó parar habían caído alrededor de 50 y me ardía el culo.

Por encima de los dos círculos rojos tengo en relieve las marcas de varios varazos. Lo toco y está caliente. Las lineas están bien dibujadas y van de una nalga a otra. Dormía la siesta muy agarrado a mí, cuando despertó me colocó a cuatro patas, ató mis manos al cabecero de la cama.
-Cuenta perra.

Conté 20, pero no hay tantas marcas de vara.  Lloro a moco tendido... la vara me derrumba, siempre. Él me abraza y me da besos, me sienta sobre su regazo, manteniendo cuidado de tener el culo al aire. Pone crema sobre mi culo. Me tranquiliza.

Cuando estoy mejor me folla el culo. Y ahora que me miro al espejo veo mi ano dilatado.Coloco el plug como me ha dicho, es el primer plug que compré, con una joya azul y me siento bonita. Con todas sus marcas.

Moratones y colorados...

Pero mi preferida está en la nalga izquierda, abajo. Estaba acostada en la cama. después de la follada, había limpiado bien su polla con mi lengua. Me abrazaba dejando caer su peso sobre mi cuerpo. Bajó poco a poco hasta mi culo. Acariciando cada una de mis marcas... igual que hago yo ahora ante el espejo... con la delicadeza de sus dedos. Dibujando entre las marcas de mis nalgas... entrando en mi ano con sus dedos. Y justo ahí, en la parte inferior de la nalga izquierda, me muerde. Tengo la marca de sus dientes en mi culo, de sus dientes, de su vara, del cepillo a orden suya, de su cinturón centrado. Tengo la marca en mi culo de su propiedad... de saber que mi culo no es mío, es suyo.






Muchas gracias a la preciosa @Ca_t8   por su idea.

martes, 8 de diciembre de 2015

Café o té. Microentrada.

Eran sus maneras...

Hora de comer, un mensaje. "A las cinco, allí." Yo sabía donde estaba allí... allí era la cafetería donde quedamos por primera vez. Allí era el comienzo del paraíso.

Me había comprado unas medias de niña buena, calentitas y negras... me puse la falda vaquera, la blusa gris y la chaqueta de cuero negra, con las botas a juego. Me sentía bonita con los labios rojos para Él.

Caminé hasta la cafetería. Él daba un sorbo a su café, negro, cuando yo entraba... y estaba muy guapo, jersey de cuello alto gris, vaqueros.  Me indicó su lado cuando me acercaba a la mesa. Tomé asiento y metió la mano entre mis piernas.

-mmm, tenía las manos frías... y nada me las calentaba. ¿Café o té?
-Té, por favor.

Jugaba con mi coño, y no paró cuando trajeron mi té... ni cuando me indicó que bebiese... Estaba empezando a excitarme.

Aumentó la velocidad y la fuerza, necesitaba correrme. Lo miré con ojos compasivos.
-Por favor, Amo.
-Bebe.

Seguí bebiendo mi té, mientras Él charlaba conmigo como si no pasase nada.

-Y ahora, córrete.

Estallé, por supuesto... no podía aguantar más... Agarrada a la mesa y con los ojos cerrados, manteniendo el silencio y la compostura tanto como podía.

Cuando me recuperé dio el último sorbo a su café. Pagó y nos fuimos.

Llegamos a su casa y me folló con fuerza, derramándose en mi espalda.

martes, 1 de diciembre de 2015

La tecnologia nos facilita la vida.

Mi móvil murió definitivamente la semana pasada, hoy me han notificado que no hay posibilidad de resucitarlo y que me avisarán para que elija uno de repuesto. El que tengo actualmente de sustitución es un tamagochi y desde ahí no puedo escribir. No he abandonado a Erytheia, volveré cuando sea más fácil... La inspiración en el ordenador me decae.

Aún así estoy tratando de leeros casi a diario