Eran las 10 de la mañana, hacía calor y llovía. Una falda de tela vaquera y una camisa blanca. Él me había citado allí en media hora y a mí la lluvia me había cogido de imprevisto. En un soportal me refugiaba cuando lo vi aparecer. Vaqueros, camisa azul oscura, zapatos marrones. Llego a mi lado y me besó, tenía el pelo mojado y pasó las manos por sus canas.
-A ti también te ha cogido ya en la calle...-me dijo mirandome de arriba a abajo. -Abrete la blusa dos botones nena, que para lo putita que eres, vas muy recatada.
Obedecí sonrojada, lo cierto es que aún me costaban esas cosas.
Paró un taxi y me indicó que avanzase delante suya. Abrí la puerta y le dejé pasar, me monté tras Él y me agarró los pezones con fuerza. Indicò al taxista que fuese hacia a mi casa... lo que me puso un poco nerviosa porque con las prisas había dejado la cama sin hacer y sabía que eso le molestaría.
- ¿A mi casa?
-¿Algún problema nena?
-Bueno... no... solo qué....
-¿No quieres que vaya a tu casa Erytheia?
-Sí, sí quiero, no pasa nada...
-Pues entonces calla.
Agaché la cabeza. Él me acarició la mejilla y me besó...
Llegamos a casa y me desnudé. Él caminó directamente hasta mi habitación y yo fui a por agua fría para llevársela... me froté el culo... sabía que me esperaban unos azotes... A veces mi Amo es un poco quisquilloso con según que temas...
Cuando entré en la habitaciòn había varios almohadones sobre la cama. Lo miré con cara de pena y levantó una ceja.
Me coloqué con rapidez en el sitio.
-Nena. ¿Cuantas normas tienes que seguir en tú día a día?
-4 Amo.
-Refréscame la memoria. ¿Cuales son?
-Dormir entre 8 y 10 horas diarias, ni más ni menos. Hacer cinco comidas al día, comiendo sano, hacer ejercicio y beber dos litros de Agua. Mantener mi higiene y estar preparada para ser usada, incluyendo depilación. Mantener el orden y limpieza de la casa siempre y sin excusas.
-Bien. Si las recuerdas ¿Por qué no está ordenada esta habitación?
-Salí con prisas Amo... no quería llegar tarde y...
-¡Sin excusas Erytheia! - callé de inmediato.- ¿Cuantos azotes necesitas para recordar tus reglas zorrita?
-Los que usted considere Amo.
-Serán 20. No me gusta que chilles, ya lo sabes.
-Sí Amo.
Me besa y empieza. Yo suspiro y gimo, no me ha pedido que cuente, llevo la cuenta en silencio... quedan 4.
-Nena ¿Cuantos faltan? -dice dándome el número 17
- Tres, Amo.
Me besa al acabar y me susurra que no me mueva. Vuelve y pone crema hidratante en mi culo dolorido y rojo.
-Ponte en 4 cariño.
Se coloca delante de mí y mete su polla en mi boca. Me deja hacer. Lamer sus huevos, comerlos. Hasta que se derrama en mi boca y trago.
Me masturba, estoy muy caliente, chuparla siempre me excita.
-Amo por favor...
-No nena.
-Amo, permítame correrme... por favor... -Nena, las perritas desobedientes y castigadas no se corren.
Para y me tumba sobre la cama, me folla muy lento, es una tortura porque me excita sin llegar al orgasmo. Al final se derrama dentro. Se la limpio bien y me manda a la ducha.
-A ver si te calmas, que estás en celo y así no puedes cenar
Este amo si que sabe como dirigir a una mujer para excitarla y hacerla disfrutar. Excelente relato.
ResponderEliminarBesos Carnales.
Muchas gracias! : )
EliminarTiempo sin comentar, pero sí te he leído en silencio preciosa...
ResponderEliminarAy, creo que es de esos castigos que hacen hervir la sangre... me gusta mucho esta pareja...
Besines...
Esta es tu casa, puedes estar en silencio o charlando por los codos que siempre tendrás tu sitio.
EliminarLos castigos.... ainss
Gracias
Beso grande