miércoles, 29 de julio de 2015

En compañia

Hacía rato que no me permitía ver. Hoy me quería atenta a mi oido, al tacto de mi piel y a todas las sensaciones que recorrían mi piel.

A cuatro patas recorría su piso con soltura, no importaba el antifaz. Me había dado de comer y había cuidado de Él durante la siesta.

Ahora eran las siete y me había pedido que lo vistiese, después me había dado un vestido negro ceñido y unos tacones altos.

Me quitó el antifaz cuando aparcó el coche.

-Te lo pondré al entrar nena. ¿Confías en mí pequeñita?
-Siempre, Amo.
-No me voy a apartar de ti, vamos a conocer a unos amigos míos, también vienen Silvia y Carlos.
-¿Vamos?
-Estoy lista, cuando quiera.

Entramos en un bar pequeño, el portero encontró nuestros nombres en una lista corta y nos hizo pasar.

Me volvió a poner el antifaz y me dio ña mano. Fuimos hasta una mesa, me senté en una suave alfombra a sus pies y puso en mis manos una copa ancha. Daikiri de fresa (me conoce como nadie).  Apareció un hombre, mi Amo se levantó y yo me arrodillé esperando.

-Ery nena, ponte de pie. -Obedecí de inmediato.
-Este es Salvador, es amigo mío- me dio la mano del Señor, quien la besó con delicadeza.
-Encantado Erytheia.
-Igualmente Señor.
-Mi sumisa Clara, Erytheia.
-Encantada, Clara.-Dije cuando se me acercó a darme dos besos.
-Igualmente, Erytheia.

Nos quedamos de pie, la una al lado de la otra. Apareció en ese momento Carlos, junto a Silvia, por último me presentaron a Gonzalo y Mérida.

Entramos luego en un reservado.
-¿Recuerdas tu palabra de seguridad?
-chirimoya.
-Muy bien nena, ahora vamos a jugar un poco, mis amigos te verán. Estás preparada, eres muy buena y estoy contigo ¿Vamos?
-Iria al fin del mundo con usted, aunque no tuviese plano. Vamos.
-Perfecto princesa. Recuerda que te quiero.
-Nunca lo olvido mi Señor.

Entramos en la habitación y me ató a una cama. Comencé a escuchar musica y poco rato después sentí unas manos que me tocaban, no eran las de mi Amo, además había más de una persona acariciando mi cuerpo. Mi Amo me besaba mientras me excitaban.
-Chupa perra.
Metió su polla en mi boca y comencé a chupar con ganas, mi excitación era enorme.

-Clara. Comienza. -escuché decir.
-Silvia, derecha.
-Mérida izquierda.

Casi a la vez tres bocas se colaron en mi coño y en cada uno de mis pezones, mientras que las manos desaparecían de mi cuerpo.

Por lo que oía a las otras sumisas las estaban follando. Mi Amo se corrió poco después y todo paró. Yo respiraba agitada. De repente lo sentí dentro de mí. Me estaba follando acagarrandome los pechos.

-Córrete Erytheia. ¡Ahora! - dijo cuando yo pensaba que no aguantaría más. Me dejé llevar y grité hasta no poder más. Caí rendida. Mientras Él se apoyaba sobre mí. Me quitó el antifaz y ya no había nadie más en la habitación.

-¿Como estás mi Amor?
-Muy bien Amo... -dije con una sonrisa pícara en la cara.
-¿Has disfrutado?
-Muchísimo mi Señor.
-Perfecto. Vamos a salir, nos están esperando. Imagino que querrás verles las caras.
-Si y agua por favor mi Amo. 
-Claro mi niña.

sábado, 25 de julio de 2015

Insomnio

Era ya tarde... no había una sola luz que la alumbrase, acurrucada en el lado derecho de la cama mientras el dormía... ella susurrando: despierte porfi despierte... sin querer que el lo oyese, pero queriendo que la usase. Ella que tenía fama de dormirse por los rincones y acostarse a la hora de los niños había tomado por costumbre, desde hacía poco menos de un mes, no conciliar el sueño por la noche...

Acarició la piel que acompañaba la suya en la cama... buscó el vello de su pecho... acariciarlo para relajarse y ver si conciliaba el sueño... escuchaba su respiración... el suave ronquido intermitente y a descompás que interrumpía el silencio de la habitación... Tenía la piel suave... Ella no la veía, pero sus dedos habían bajado lo suficiente como para encontrarse con la marca del bañador... era moreno y con una envidiable facilidad para tostarse en verano. Erytheia era la primera envidiosa de aquella piel... La suya tendía más al rojo si no tenía cuidado.

Sintió su polla sobre el calzoncillo y se excitó... llevó una mano a su propio cuerpo... acariciando sus pechos mientras seguía tocandolo a Él, casi rozándolo para no despertarlo...

Él se despertó en el momento justo. La montón y se la folló con brutalidad. Se corrieron juntos...

-Duerme perra, te has ganado un castigo.

La besó y la mantuvo toda la noche en vela, maldiciendo sus ansias. 

jueves, 23 de julio de 2015

La casa nueva.

Era la primera noche que tenía mi propia casa. Un colchón en el suelo y nada más. El resto del mobiliario llegaría al día siguiente. 

Él apareció esa noche con comida del  chino.

-Una casa vacía, un colchón y una perra... divertido. A cuatro... y no te quiero ver andando como una persona en toda la noche.
-Si, Amo. -dije ya a cuatro patas.
-Enséñame la casa nena.
(Él ya conocía la casa... era por pasearme)
Así que le fui guiando por toda la casa. La primera parada la tuvo en la cocina, donde me folló la boca con velocidad hasta alimentarme con su semen.

Después me llevó al baño, donde limpié su polla hasta dejarla reluciente.

Cuando habíamos hecho todo el recorrido volvimos a la cocina donde me apoyó sobre la encimera y me azotó. 

Me folló allí mismo, entrando en mi (SU) culo y masturbandome con los dedos. Me permitió correrme cuando Él lo hizo y volvió a hacerlo cuando salió de mí.

-Anda nena, ponte de pie, vamos a cenar.

Fue divertido. Pusimos las bandejas del chino en donde iría la mesa y nos sentamos en el suelo donde iba  el sofá. Le serví yo, le di de comer y Él me alimentó a mí directamente desde su boca. Cuando acabamos nos arremolinamos a charlar en la cama. Yo jugaba con sus pies, dandole besos pequeñitos a puñaos.

Subiendo por su cuerpo lo encendí. Me tumbó sobre la cama, en el medio. Colocó mis brazos sobre mi cabeza y mis piernas sobre Él. Me folló y se derramó sobre mí.

Así nos levantamos aquella mañana, hace un año ya.

domingo, 19 de julio de 2015

La primera

Andrés y yo llevabamos un par de meses quedando, conociéndonos, yo había tenido varias sesiones esporádicas, Él había tenido dos sumisas.

Cuando nos sentimos cómodos y lo tuvimos todo claro tuvimos nuestra primera sesión. Ahí aún no era mi Amo y yo solo lo llamaba Señor.

Nos encontramos en su casa. Yo estaba de rodillas en la puerta y Él llegó y me besó. Después me acarició y me dijo: "tranquila que yo te cuido." Fuimos hasta el salón y ahí comencé a chupársela. Él se sentó en el sofá y de repente se levantó. Volvió con unas pinzas que colocí en mis pezones. Después puso otra en mi lengua.

-Coloca los brazos sobre el sofá. Alza el culo y separa las piernas.
-Si Señor.

Azotó mi culo un par de veces, con las manos y con la correa.

Me llevó a cuatro patas hasta la habitación. Fue dificil me costaba mucho mantenerme quieta y Él no paraba de decirme que me estuviese quieta, acompañado de azotes en mi pierna.  Allí jugó con un vibrador en mi coño hasta que se dio cuenta de que mis flujos mojaban la cama.

-Zorrita, lo estás pringando todo.

En ese momento me folló con brutalidad, besándome y chupando mis pechos aún adoloridos por las pinzas. Ese día no me permitió correrme...

-A las perritas como tú no hay que dejarlas correrse muy a menudo.

Eso cambió con el tiempo... porque un día pasó a ser mi Amo y poco más tarde, mi Amor.

jueves, 16 de julio de 2015

Algunas veces desvarío.

A veces se cuelga de mis pechos cuando estamos en la cama. Se columpia en el sabor de mi pezón derecho y mientras yo escalo por su labio al paraiso... esa combinación de mi piel con su piel y un poquillo de calor...

Esas noches de irse a la ducha después de pasar por la cama... en esas noches se encariña con mi coño, que es suyo... y siempre hay un dedo al acecho que palpa y vigila... como si Él no supiese de sobra que yo solo escaparía para nadar en su boca.

Hay momentos de rodillas frente a su polla en los que se me hace eterna la distancia que me separa... y envidio a mi aliento por acercarse en un vuelo... Después me la ofrece como un caramelo y la lamo... porque no hay manjar mejor que el sabor de la carne... si es la suya.

Y es que no hay momento en el que el sentimiento de propiedad que ejerce sobre mi cuerpo, se relate mejor que cuando entra en alguno de mis agujeros... y me penetra porque soy suya y puede hacerlo.

jueves, 9 de julio de 2015

Todo Erytheia

La recogí a la una y media. Llevaba un vestido blanco, suelto, con dibujos étnicos que ella calificaba como azul marino y yo puedo asegurar que los veía negros. Zapatos rojos, bolso rojo pequeñito y su nuevo peinado corto.
Estaba radiante y se la veía feliz.

Nos montamos en el coche y conduje hasta su restaurante favorito. Un lugar de pescado a la brasa cercano a la playa.  Había reservado una zona apartada del local, un pequeño comedor privado.

Ella no paraba de besarme, abrazarme y acariciarme. No nos despegábamos, y con su felicidad andaba como a pequeños saltitos.

Pedimos albariño y dorada con patatas a lo pobre. De entrate ostras y de postre sorbete de mango fresa y limón. 

Ella me seguía besando, sin apartarse de mí. Yo jugaba con sus pechos mientras insistía en que comiese. 

Cuando acabamos de comer fuimos a mi casa fe campo. Se desnudó en la puerta. A cuatro patas gateó hasta el salón. La tumbé en el sofá y abrí sus piernas. La acaricié poco a poco. La besé y puse mi polla en su boca. Ella chupó con ganas, despacito (es la mejor chupando)

Al final la penetré lentamente. Recreandome en su cavidad, sintiendo cada trozo de su piel.

La follé lentamente, besándola despacio. Hasta que noté que estaba a punto de  correrme y salí de ella, para vaciarme en su boca.

La llevé a cuatro patas hasta la cocina. La tumbé sobre la mesa y vendé sus ojos. Jugue con hielo sobre su coño.  Azoté sus nalgad con la cuchara de madera. Y por último levanté sus piernas y me la volví a follar por su lindo culito. Se corrió con mis embestidas en su ano.

Me encanta ella.

miércoles, 8 de julio de 2015

Gracias

Que suerte llegar perdida a un mundo y que te orienten.

Que suerte llegar miedosa a una casa y que te acojan.

Que suerte tuve y que suerte tengo.

Soy la más mimada del mundo.

http://almaysentirdelobo.blogspot.com.es/2015/07/feliz-cumpleanos.html?showComment=1436422938527&m=1#c654194957984574772

Gracias Amigo

domingo, 5 de julio de 2015

El bikini

Tengo una amiga que dice que no hay nada mejor que follar y nada peor que follar con calor...

Pues bien. Hoy en mi tierra estábamos a 40 grados a la sombra, sumemoslé humedad y viendo caliente... una maravilla de tiempo...

Mi Amo que es más bueno que el pan me llamó por la mañana y me dijo que me preparase para ir a la playa. Me esmeré en gustarle, porque sé que la playa no le gusta nada "demasiada gente y demasiada arena." Bikini que realce mi cuerpo, vestidito muy cortito, cola alta, gafas de sol y unas chanclas que resalten mi tobillera. Soy Suya.

Me recoge en coche sobre la una. Viene con bañador, chanclas y camiseta. Me besa y sonríe. Salimos dirección a la playa,  llegamos en unos veinte minutos. Me envía a buscar sitio y va directo a reservar mesa en el chiringuito. Vuelve con dos limonadas...

-¿Te has puesto ya crema?
-Aun no.
-Gira.
Comienza su ritual, me pone crema por todo el cuerpo... tarda bastante rato. Luego me permite ponerle a Él. Se tumba bocarriba en la hamaca y me agarra fuerte la mano. Bebe de su limonada y refunfuña cuando siente algún niño correr cerca haciendo ruido. Yo me río de sus quejas, porque en realidad le encantan los niños. Llevamos un rato cuando tira de mi mano. Me levanto y lo sigo a la orilla. Al tocarla con el pie retrocedo.

-Está fría. - digo ante su mirada.

Me coge en brazos y sin escucharme entra en el agua. Cuando el agua le llega al pecho me dice.

-Su parada Señorita. Abajo. -Le pongo cara de cachorrillo triste, está muy  fría. - ¿Te bajo yo?
Insisto un poco, a ver si cede... pero como esperaba no lo hace y se sumerge conmigo en brazos. Ahora ya estamos ambos mojados. Nado un poco, alejándome de Él y lo salpico. Se abalanza sobre mi y me hace cosquillas. Me besa, aprieta mis pezones y nada más adentro conmigo.

Cuando nos vemos solos baja la parte inferior de mi bikini.
-Ese bikini tuyo tan pequeñito me la ha puesto muy dura zorrita. Tendrás que solucionarlo.

Me muerdo el labio y sonrío pícara... me encanta. Me besa con pasión y me aprieta los pezones sobre la tela. Me la clava así, de pie. Coloca mis piernas sobre Él y me folla. Me embiste sin separarse de mi boca... en silencio... en un beso largo...

-Córrete nena, córrete ahora.

Me dejo llevar por la oleada de placer que me invade. A la vez que Él se derrama en mí. Quedo rendida. Me sumerjo para limpiar su polla y salgo del agua. Nadamos hacia la orilla, lo sigo.

-Es hora de comer. Sécate y vuelve a ponerte crema.

Mi amiga no tiene ni idea.

viernes, 3 de julio de 2015

3 de la mañana

Entre la oscuridad palpo la cama buscándolo. Lo encuentro dormido a mi lado, muy dormido. Me acerco despacio y flojito flojito, casi pensando le digo: " despierte ande, canseme a ver si pillo el sueño..."

A veces me paso de traviesa y verlo tan dormidito me da ganas de comermelo entero, porque es mi Amo, pero también mi amor, es mi Rey y mi niño. Despacito, en silencio, sin hacer ruido, me acerco a su ombligo y lo beso. Subo por su pecho y llego hasta su boca. Con una mano masajeo su polla... le doy besos pequeñitos... si se despierta me voy a ganar un gran castigo, así que debo aprovechar el momento, siendo cuidadosa... de repente responde a un beso de mi boca. Su polla está erecta y su cara de mosqueo lo dice todo.

-¿Estás cachonda perra?
-Mucho Señor...
-Monta... y más te vale hacerlo tan bién que merezca la pena haberme despertado.
-Sí, Amo.

Lo obedezco y me introduzco su polla de un golpe... voy moviendome de forma circular, arriba y abajo. Él me pellizca los pezones y me marca la velocidad... estoy muy muy excitada.
-¿me permite correrme Amo?
-No perra, espera.
Continúo, cada vez más excitada y al final se corre dentro de mí. Yo sigo moviéndome  sobre Él, despacio, buscando que me permita correrme. Un azote seco.

-Baja y limpia.

Obedezco, restregandome un poco contra su pierna... podría correrme con cualquier cosa ahora mismo... la dejo limpia y se levata.
-túmbate, bocarriba.
Lo veo aparecer a mi lado, me esposa y me masturba.
-Por favor Amo... no voy a aguantar más.
Saca los dedos y los mete en mi boca.

Se da la vuelta y se acuesta en la cama. Me deja esposada, boca arriba, sin poder moverme y mucho menos tocarme...

-Ahora sé una buena perrita y déjame dormir.
Se da la vuelta y veo como se duerme...

-Mierda! - susurro... con esta excitación no voy a poder dormir bien...

-¿Has dicho algo?

-Nada Amo, que dulces sueños.... -digo... probablemente roja como un tomate.

-Ya me parecía... dulces sueños princesa traviesa.